El Fondo de Recuperación Europeo tiene como objetivos principales: la transición ecológica y la transformación digital. España ha decidido asignar un tercio del total de los fondos europeos a este segundo pilar para impulsar la digitalización del tejido productivo, la conectividad digital y para poner en marcha un plan para abordar la digitalización de las administraciones públicas.
Tras la aprobación del Fondo de Recuperación Europeo, el instrumento con el que la Unión Europea (UE) pretende hacer frente a la crisis derivada de la pandemia del coronavirus, la economía europea recibirá un total de 750.000 millones de euros en los próximos años. Uno de los países más afectados por la COVID-19 ha sido España, y es por este motivo, por el que nuestro país será uno de los principales destinatarios, con lo que recibirá 140.000 millones de euros para su recuperación.
El Fondo de Recuperación Europeo se rige por dos vectores principales: la transición ecológica y la transformación digital. El Gobierno, del total de las ayudas asignadas a España, ya ha previsto dedicar al segundo pilar un 33% -por encima del mínimo del 20% fijado por la Comisión Europea-. Así, la distribución de los recursos se refleja en los Presupuestos Generales del Estado de 2021, y el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital dirigido por Nadia Calviño contará el próximo año con un presupuesto para inversión en digitalización y telecomunicaciones de 4.230 millones de euros, una cantidad seis veces mayor a la de 2020.
Agenda España Digital 2025
En los Presupuestos Generales del Estado de 2021 se incluyen dotaciones extraordinarias para el desarrollo de diversos programas en materia digital. Todos ellos tienen como objetivo el despliegue de la Agenda España Digital 2025, que servirá como hoja de ruta para guiar los fondos destinados a la digitalización y que recoge un conjunto de medidas, reformas e inversiones articuladas en 10 ejes estratégicos como la modernización del tejido empresarial -con especial foco en las pymes- y de las administraciones públicas, la creación de ecosistemas emprendedores de base tecnológica, la transferencia de innovación y la mejora de la capacitación digital en el ámbito laboral, entre otros. En concreto, se destinará una inversión de 3.750 millones de euros, de los que un 97% proviene de las ayudas europeas.
Según destacan desde Banco Sabadell, “la Agenda España Digital 2025 aborda debilidades del país en el ámbito digital, especialmente las vinculadas a capital humano digital e integración de la tecnología digital en las empresas”. Sin embargo, y pese a tener deberes pendientes en todos estos ámbitos, el Índice de Economía y Sociedad Digital (DESI), sitúa a España por encima de la media de la UE gracias a la conectividad de sus redes puesto que el despliegue de fibra óptica de los últimos años ha generado condiciones favorables para el avance de la tecnología 5G. Así, los programas parecen incidir precisamente en aquellas áreas en las que existe una brecha con respecto a la media europea, como son la integración de la tecnología digital en las empresas, especialmente en el tejido de las pymes, y en la capacitación digital.
Los sectores más beneficiados
Además, existen ciertas industrias que podrán beneficiarse en mayor medida del impulso que supondrán las ayudas europeas en la digitalización del tejido productivo español. Estas son el sector agroalimentario, el biosanitario, el de la construcción, el audiovisual, el de la movilidad sostenible, el del comercio minorista y el del turismo inteligente. Este último, sobre todo, por ser uno de los más afectados por la crisis económica.
En este sentido, el sector de las telecomunicaciones también va a jugar un rol vertebrador debido a que la digitalización de los procesos está siendo un aspecto clave para mitigar los efectos de la COVID-19. Los consumidores, las empresas y los países se han percatado de la importancia de tener que contar con una infraestructura de las telecomunicaciones que funcione correctamente.
En definitiva, “España ha señalizado a través de los Presupuestos Generales del Estado de 2021 una vocación clara de otorgar un fuerte peso a la digitalización como vector de transformación”, tal y como afirman desde Banco Sabadell. Así pues, todas las industrias que puedan integrar la digitalización en su operativa se verán beneficiadas tanto por la tendencia imparable de la digitalización como por la inyección de los fondos públicos.
Para más información, puedes visitar nuestra web sobre el Fondo de Recuperación Europeo.
Comentarios